Linfedemas postoperatorios

Experiencia clínica

Las pacientes y los médicos aprecian el efecto masaje y la utilidad terapéutica de los productos Lymph O Fit™. «Al cabo de poco tiempo de uso, las mujeres perciben un alivio de los dolores locales. Se redujeron las áreas de linfedema existentes», resume su experiencia la Dra. Sylvia Mück, Directora de la Unidad de Ginecología/Oncología de la Clínica Sigel en Bad Schönborn.

Si no se trata, un linfedema no desaparece, sino que va empeorando continuamente. Entonces, es aconsejable o necesario aplicar de manera continua terapias y productos para la descongestión linfática. Los productos Lymph O Fit™ apoyan la remisión rápida de edemas postoperatorios y mejoran la controlabilidad de trastornos crónicos del drenaje linfático.*

Las etapas de desarrollo de un linfedema se dividen en diferentes fases clínicas

  • Fase 0 (fase latente): el funcionamiento del sistema linfático está perturbado, pero todavía           se puede compensar
  • Fase I (fase reversible): sobrecarga del sistema linfático, hinchazón de los tejidos afectados,        el tejido todavía está blando. Colocando en alto la parte afectada solo se consigue una                descongestión de corta duración.
  • Fase II (fase irreversible): ha aumentado el tejido conjuntivo, el tejido empieza a endurecerse.       Colocando en alto la parte afectada no se consigue ninguna mejora; se requiere una                     descongestión compleja.
  • Fase III (elefantiasis): hinchazón extrema, la piel está dura, se producen crecimientos.

Tratamiento y prevención del linfedema

Si el linfedema no se trata en su fase inicial, la parte afectada del cuerpo se va hinchando cada vez más y el tejido sufre alteraciones. Cuanto antes empiece el tratamiento, mejor.

Al detectar los primeros síntomas, las personas afectadas deberían consultar sin falta a un médico para iniciar la terapia oportuna. Esta combina el drenaje linfático con un tratamiento de compresión con vendajes especiales y prendas de compresión. En este ámbito, los médicos, los terapeutas y los establecimientos de ortopedia colaboran estrechamente.

Linfedemas postoperatorios – prevención y tratamiento

Las lesiones del sistema linfático pueden causar daños permanentes y, en consecuencia, un linfedema. «Lymph O Fit™» de Anita es una posibilidad de tratamiento para distintas indicaciones.

En caso de un linfedema, el flujo de la linfa por los vasos linfáticos está perturbado. Se acumula líquido en los espacios intercelulares, causando una hinchazón visible y palpable. Las causas pueden ser lesiones, p. ej., contusiones o intervenciones quirúrgicas.

Entre las causas más frecuentes se encuentran enfermedades tumorales en la zona del pecho y su tratamiento. La extirpación de ganglios linfáticos que necesita realizarse con frecuencia en el tratamiento del cáncer y el corte de vasos linfáticos durante la operación pueden obstaculizar fuertemente u obstruir por completo las vías de drenaje de la linfa. También la radioterapia repercute negativamente en los vasos linfáticos.

Entre un 20 y un 30 % de las pacientes de cáncer de mama se ven afectadas por linfedemas secundarios. Con frecuencia, los primeros síntomas, tales como pesadez, tirantez e hinchazón incipiente, solo aparecen al cabo de varias semanas o meses desde la cirugía de cáncer, pero también se pueden manifestar años después.

La gravedad de un linfedema depende

  • del número de ganglios linfáticos axilares extirpados
  • de la radicalidad de la intervención
  • de la cicatrización posoperativa
  • del tipo y la envergadura de la radioterapia y las alteraciones fibróticas causadas por la misma
  • de la medida del tumor y de la afectación de los ganglios linfáticos